Victoria Padial cuelga los esquís
La biatleta granadina, a través de una emotiva carta, se ha despedido de la alta competición aunque seguirá vinculada a la promoción y práctica de su deporte.
Avance Deportivo
@deportivoavance
13 de septiembre de 2020, 11:00
Con el «biatlón en su corazón», tal y como reza el título de la misiva, así se ha despedido Victoria Padial del deporte que la ha hecho competir en dos Juegos Olímpicos de Invierno y disfrutar de una aventura que no finaliza, si no de la que cierra una etapa.
«Este 2020 pintaba de fábula. Pese a una temporada ausente en el panorama de competiciones por mononucleosis ya empezaba a visualizar mi regreso a la competición», ha descrito en el texto, donde ha subrayado que «para la mayoría, este memorable 2020, supondrá un antes y un después en muchos aspectos de nuestras vidas profesionales y personales. Los que habéis seguido mi aventura de ser biatleta en España sabéis que nunca me ha faltado motivación, fuerza y coraje para superar todas las adversidades económicas y sociales que han supuesto ser la primera mujer olímpica de un deporte fascinante que no se atiende ni promociona en nuestro país».
De este modo, Padial ha insistido: «Hoy a mis 32 años, y sin haber cotizado uno solo, me es imposible seguir dedicando tiempo a un trabajo no remunerado que además ha contribuido a la aportación de importantes subvenciones de la Federación Internacional de Biatlón (IBU, en sus siglas en inglés) para el desarrollo del biatlón español y ni siquiera a día de hoy contamos con un equipo nacional después de tantos años de sacrificios y resultados, es desolador».
Según la biatleta, «no me arrepiento de nada, a pesar de las dificultades, he vivido unos años muy intensos y felices, siempre he representado a España con toda mi fuerza, orgullo y valentía. Mis vivencias y logros siempre me acompañarán en el corazón al igual que todo el cariño y apoyo que he recibido incesantemente por parte de mi estupenda familia, amigos, patrocinadores, periodistas y seguidores».
Asimismo, la granadina ha recordado que «el biatlón fue pasión al primer disparo, a pesar de comenzar con 18 años, lo que parecía una misión imposible, se convirtió en una gran aventura llena de retos y emociones constantes. El biatlón es parte de mi vida y siempre lo será y también ha sido mi mejor casualidad por permitirme conocer a una persona maravillosa, mi entrenador Alexandre Nappa, hoy mi compañero de vida y marido. Juntos hemos escrito importantes páginas para la historia del deporte español y juntos seguiremos trabajando para hacer mas accesible nuestro deporte en España bajo la marca europea BiathlonFIT «.