Attaoui. Fuente: COE

El atleta cántabro, de 21 años, plusmarquista español (1:42.04), ha sido el 2º español en la historia que logra el pase a la final olímpica.

Avance Deportivo

@deportivoavance
10 de agosto de 2024, 00:00

Es el segundo español en la historia que lo logra. La jornada se completó con las actuaciones de los relevos largos masculino y femenino, que no gozarán la misma fortuna que el mediofondista cántabro en los Juegos Olímpicos de París 2024.

Las del récord español por costumbre, las mujeres del 3:25.25, fueron las primeras atletas españolas en pisar violeta para ser protagonistas de la antepenúltima sesión del Stade de France. Por la calle 9, enfrentándose (por orden de carriles) a Suiza, Cuba, Bélgica, Noruega, Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia. Casi nada. Por los albores de su mejor registro estuvo el pase a la final, cerrado con q (accedían los 3 primeros equipos más los 2 mejores tiempos) por Canadá en 3:25.77 en la 2ª de las 2 series. Nada que reprochar a Blanca Hervás (52.50), Berta Segura (52.20), Eva Santidrián (51.60) y Carmen Avilés (51.99), 5ª en su carrera con 3:28.29 y 12ª del sumario.

Acto seguido se adentraron en el corazón de Saint Denis los hombres. Uno de ellos muchacho (el talento es lo que tiene), David García Zurita (tercer parcial, 46.18), 19 años, formando cuarteto con el siempre solvente Iñaki Cañal (primera posta en 45.20), el laureado Óscar Husillos (segunda, 44.70) y el rematador Julio Arenas (45.61). Finalizaron 7º con 3:01.60 (el récord español es 3:00.54) y se logró la última plaza por tiempos con 3:00.08 (Zambia).

Hay que valorar esa marca en una carrera con mucho tráfico en los cambios, especialmente en el último, cuando justo después de recoger el palo de manos de David, Julio se vio trastabillado, lo que le obligó a un esfuerzo descomunal en los primeros metros que culminó con una lección de entrega en la recta final, demostrando que cuando uno se enfunda la remera de su equipo nacional está más que dispuesto a que el ácido láctico le salga por las orejas.

El foco estaba en las asesinas semifinales de los 800 metros, donde Mohamed Attaoui partía en la 3ª y última (avanzaban a la final los 2 primeros de las 3 careras y 2 tiempos). El cántabro, 22 años en septiembre, plusmarquista español (1:42.04), salía con la segunda personal y season best, sólo superado por los imponentes 1:41.58 del keniano Emmanuel Wanyonyi (plusmarquista mundial de la milla en ruta). Sólo uno de los nuestros, en toda la historia del olimpismo, había corrido una final de 800 metros (Adrián Ben, quinto en Tokio).

El sábado a las 19:05 serán 2, puesto que Moha fue 4º con 1:43.69, la última de las q. Supo tirar de sangre fría y, sabedor del alto ritmo, aguantar su clásico ataque hasta los últimos metros, evitando así la incertidumbre de un arranque temprano que pudiera ser aprovechado por sus rivales. Es rapidísimo, cada día lee mejor una disciplina enigmática como el 8 y tiene esa aura desabrida que suelen mostrar los más grandes cuando están a las puertas de la gloria.