La sevillana María Fatou durante una competición. Fuente: AD

La windsurfista sevillana, campeona de España en la clase techno sub 17, afronta con ambición y ganas los Juegos Olímpicos de la Juventud en China.

Jesús Ortiz García

Las olas eran para María Fatou sinónimo de vacaciones y veranos en las playas de Huelva. Hoy son su vida. No puede vivir sin el mar y sin el viento, sus mejores aliados junto con la tabla y la vela. La regatista del Club Náutico de Sevilla vive un momento dulce, es la dominadora en España de la clase techno 293 sub 17, quedó 7ª en el Europeo y 29ª en el Mundial. Ahora en agosto culminará una temporada de ensueño con los Juegos Olímpicos de la Juventud en Nanjing (China).

La windsurfista Sevilla en una prueba. Fuente: AD

Desde que en 2009 un curso en la escuela de vela de Islantilla supuso el descubrimiento de su gran pasión, creyó que su futuro estaría ligado a este deporte con un claro objetivo, el de reinar al más alto nivel con trabajo y esfuerzo. «Cuando empecé a navegar por primera vez me encantó y decidí seguir progresando. Mis metas son llegar a lo máximo, llegar al límite en cada regata y dar todo lo que esté en mis manos para lograrlo», subraya la andaluza.

La chica de sonrisa perenne aprendió rápido a manejar el mástil y a ‘bailar’ sobre la tabla. «Lo que más me gusta es el gran ambiente que hay en los entrenamientos y competiciones, disfruto mucho. Aunque pasé un momento duro cuando no llegaban los resultados, me veía siempre en la cola, hasta que empecé a coger nivel y ahora estoy entre las mejores», comenta. Lo acreditan sus títulos de campeona de España y su buen rendimiento en el Mundial y en el Europeo, donde logró el pasaporte para las Juegos Olímpicos de la Juventud.

«Estoy deseando que llegue, hay muchas ganas. Será una experiencia increíble y espero hacer una regata seria para pelear por las medallas. Viendo el nivel de mis rivales puedo estar entre las primeras. Estoy preparada», recalca. María navegará en el lago Jinniu, «un sitio bastante feo respecto al viento, porque habrá poco, y esa es una de mis debilidades. Trataré de suplirlo con mi fortaleza muscular y mi mentalidad ganadora y competitiva. Aspiro a lo máximo».

De Sevilla a Puerto Santa María

La windsurfista viaja todos los fines de semana de Sevilla hasta Puerto Sherry (Cádiz) y afirma que cuando no puede ir a entrenar siente que le falta algo. «La vela y la tabla forman parte de mí, cuando te mueves se mueve todo. Sobre ella me siento feliz y libre, como si volara sobre las olas. Hay mucho feeling con el mar y el viento», insiste.

María asegura que para estar entre las primeras en cada carrera se requiere mucha fuerza «porque la vela pesa mucho, aprender tácticamente qué hace el viento y fortaleza mental. Soy de carácter fuerte, funciono bien bajo presión y es en los momentos críticos cuando mejor trabajo». 

María Fatou navegando. Fuente: AD

A la joven de 16 años le gustaría seguir la estela de otras 2 sevillanas que destacan a nivel mundial como son Marina Alabau y Blanca Manchón. «Son un ejemplo de superación y esfuerzo. Blanca es una gran competidora y lo de Marina es impresionante, ha sido subcampeona en el Europeo en su vuelta a la vela tras ser madre. Demuestran que en España hay gente con mucha calidad», apunta.

Su trayectoria invita a mantener intacto el sueño de dedicarse a este deporte, aunque el futuro dependerá de los resultados y de los recursos económicos: «Estoy centrada en los estudios y en disfrutar navegando, pero la clave para seguir así estará en lo que haga en las competiciones y en lograr patrocinadores. Me encantaría llegar a unos Juegos Olímpicos absolutos y ser campeona». Aún le queda mucho camino por recorrer, pero mientras tanto, irá a toda vela hacia Nanjing.