Marcus Cooper, bronce en K1 500
El balear, de 19 años, ha conquistado la primera medalla para España en el Mundial de piragüismo en Moscú.
J.O.G
Se impuso con autoridad en la eliminatoria con un tiempo de 1:37.948 y en la semifinal también cuajó una gran actuación -1:37.253- y eso que había reservado gasolina para la final. Era consciente de que lograr medalla era una empresa complicada, pero Marcus Cooper ha demostrado su energía y talento a golpe de paladas para conquistar el primer metal para España en el Mundial de piragüismo en Moscú (Rusia).
El balear se ha colgado la presea de bronce en K1 500 metros con una destacada actuación en la capital rusa. Brillante debut en una competición mundial sénior del kayakista español, una de las grandes promesas del piragüismo nacional que sigue labrando un gran currículum internacional en aguas tranquilas.
El mallorquín, de 19 años, ha cuajado una gran final y ha exhibido su ambición desde el inicio de la regata con una salida veloz que ha sabido mantener durante toda la carrera. Ritmo suficiente para auparse al podio y lograr la medalla, parando el crono en 1:39.691, por detrás del danés René Poulsen, subcampeón olímpico en Pekín 2008 y bronce en K1 1.000 metros en este Mundial, que se ha adjudicado la carrera, y del húngaro Bence Dombuari (plata).
Cooper, campeón del mundo júnior en K4 1.000 metros en 2011, ha resuelto con podio la primera participación española de la jornada, después de que el sábado se quedara sin preseas en las 4 finales en las que tomó parte.