El ‘rider’ donostiarra se queda muy cerca de revalidar el título de campeón que logró en 2013 pero sigue demostrando su gran nivel sobre la nieve.

El ‘rider’ donostiarra Lucas Eguíbar durante una carrera de snowboardcross | AD

Jesús Ortiz García

Hace más de un mes una caída le privó de estar peleando por una medalla en los Juegos de Invierno de Sochi. Iba lanzado y sacando buenos tiempos, pero se quedó con una séptima plaza, un diploma olímpico. Ahora, la nueva gesta de Lucas Eguíbar ha sido conquistar una plata en el Campeonato del Mundo Júnior de snowboardcross.

El donostiarra lo ha intentado hasta el final pero no ha podido revalidar el título que consiguió en 2013 en Turquía, aún así, suma su segundo podio consecutivo en esta competición. El ruso Daniil Dilman se ha llevado el oro y el francés Ken Vuagnoux, el bronce.

Con un talento innato para este deporte, este ‘rider’ de 20 años es sinónimo de espectáculo cada vez que se desliza con su tabla sobre la nieve. Y en la pista italiana de Valmalenco ha vuelto a demostrar el gran momento por el que atraviesa.

Entre curvas, saltos, baches y peraltes, el joven español ha comenzado la carrera con energía, ambición y mucha fuerza. En una final muy disputada y marcada por las altas temperaturas, lideraba la prueba hasta la mitad del recorrido cuando le han adelantado Dilman y Vuagnoux. En los últimos metros Eguíbar ha superado en una curva al ‘boarder’ francés para acabar segundo.

Aún le queda una bala en la recámara para conseguir el oro en el circuito transalpino ya que este jueves disputará la prueba por equipos junto a Joan Pascual Valles.

Con la plata en Valmalenco cierra una brillante temporada en la que subió al segundo escalón del podio de la Copa del Mundo disputada en Vallnord-Arcalís (Andorra) y fue séptimo en los Juegos Olímpicos de Sochi tras imponerse en la final de consolación. Además, en su palmarés también figuran el Mundial júnior en Erzurum (Turquía) y el bronce en la Copa del Mundo de Arosa (Suiza).

De pequeño alternaba su pasión por coger olas en las playas de San Sebastián con desafiar a la gravedad en la nieve en Candanchú. Ahora, con apenas 2 años en la máxima categoría ha adquirido experiencia y se encuentra al nivel de los mejores ’riders’ del mundo.