El ‘rider’ donostiarra ha conquistado el Globo de Cristal de la Copa del Mundo, después de llegar a cuartos de final en la estación de La Molina (Gerona) y no ser superado por ninguno de sus rivales directos. 

Jesús Ortiz García
Actualizado: 21/03/2015 13:35 horas

Le gusta surfear en las playas de Zarautz (San Sebastián) porque le aporta tranquilidad cuando toma las curvas en su tabla sobre la nieve. Y ante la escasez de entrenos y competiciones en el manto blanco, visualiza los recorridos encima de su cama para simular cada bajada. En la estación de La Molina (Gerona), Lucas Eguíbar acaba de hacer historia al convertirse en el primer español en ganar el Globo de Cristal, o lo que es lo mismo, el campeón de la Copa del Mundo de snowboardcross.

Lucas Eguíbar. Fuente: Rfedi

A sus 21 años ha puesto picas en Flandes tras conquistar un nuevo territorio para el deporte español. Con escasas infraestructuras, en un país con poca tradición y ante potencias mundiales, ‘Luki’ logró una gesta y se desquita del sabor agridulce que le dejó el 7º puesto en los Juegos Olímpicos de Sochi.

Ya fue campeón mundial júnior en 2013 y ahora se ha coronado como el mejor ‘rider’ en categoría absoluta. En Veysonnaz (Suiza) consiguió hace una semana una medalla de oro y otra de plata en Copa del Mundo, que le situaban en 1ª posición de la general con 1.800 puntos, por los 1.200 y 1.160 de sus 2 perseguidores, Kevin Hill y Nikolay Olyunin. Así que en La Molina le valía con ser 6º para llevarse el título.

Pero cayó en cuartos de final, al igual que Hill, por lo que tenía que esperar los resultados de otros rivales. Hizo valer su renta de puntos en la clasificación ya que el ruso Olyunin no alcanzaba la final y Álex Pullin sólo pudo terminar 3º, por tanto, el español se proclamaba campeón. En los Juegos de Sochi una caída le impidió pelear por medalla, pero en esta ocasión, la suerte sí le sonrió.

Con mucha nieve tras la nevada que había caído en las últimas horas, comenzó la ronda de octavos de final. Lucas salió fuerte, con el cuchillo entre los dientes y se situó 1º, los italianos Luca Matteotti y Martin Noerl le apretaron aunque logró entrar 2º y clasificarse para cuartos. En esta fase, jarro de agua fría para el español, que no pasaría a semifinales por centímetros, pero el olimpo del snowboardcross le tenía reservado un hueco a un ‘rider’ con talento innato, luchador y trabajador. Espectacular e histórico el logro de Lucas, el primer español en ganar un Globo de Cristal.

Del esquí al snow

En las estaciones de Astún y Candanchú (Huesca) practicaba esquí con su familia pero a los 15 años se cansó y decidió probar suerte con la tabla. Aunque al principio acababa exhausto de tantas costaladas, tenía aptitudes y empezó a desafiar a la gravedad con sus saltos y velocidad.

Desde entonces, su progresión ha sido meteórica ya que en apenas 5 años se ha situado entre los mejores y ha competido en unos Juegos Olímpicos. Aunque su participación en Sochi peligró porque unos meses antes de viajar a Rusia, su hermano mayor, Nicolás, sufrió un accidente de moto que le dejó en coma. Por suerte, despertó poco antes de comenzar las Olimpiadas y ‘Luki’ acudió a la cita con más ganas. Al final, fue 7º y diploma olímpico aunque ya se le veían hechuras de campeón.

Y lo ha demostrado apenas un año después. Tras lo de Sochi, comenzó la pretemporada en verano con duros entrenamientos físicos y cambios en la alimentación que le hacían sentirse más preparado y fuerte que nunca. El esfuerzo y sacrificio ha tenido recompensa con esta hazaña para el deporte español, el Globo de Cristal de snowboardcross, con dedicatoria especial para su hermano Nicolás.