Lidia Valentín. Fuente: Bridgestone

Mariló Carvajal

@MariloCarvajal
7 de junio de 2017, 22:20

La halterófila Lidia Valentín lo tiene claro, quiere lo que le corresponde, y así lo manifestó tras acudir en el Comité Olímpico Español (COE) a un acto de Bridgestone, marca de la que es embajadora. «Quiero una medalla nueva, no quiero una medalla que esté manoseada por una persona que no considero deportista, porque cuando una persona se dopa deja de hacer deporte», apuntó.

La leonesa admitió que sintió «bastante rabia» al saber que las deportistas sancionadas no querían devolver las medallas. «¿Por qué no quieres devolver algo que no es tuyo? Te están diciendo que has sido sancionada, sabes perfectamente de qué forma ibas, tendrás que devolver lo que no es tuyo. Pero son países, como en el caso de Rusia, que tienen que devolver 37 medallas y les apoya hasta el propio país. No quieren reconocer que no han sido los vencedores», lamentó Valentín.

A pesar de ello, la triple campeona europea se mostró tranquila porque sabe que el presidente del COE, Alejandro Blanco, «está luchando por hacer justicia» y se mostró satisfecha por las sanciones impuestas a sus rivales por dopaje. «Se han destapado cosas que se tenían que haber destapado hace muchísimo tiempo y estoy feliz porque si no juegas limpio, no juegues», añadió. Además, reconoció que el mayor obstáculo que ha tenido que superar en su carrera deportiva ha sido «el tener que competir con gente que sabías que no iba en igualdad de condiciones y tener que esforzarte el triple» para «competir con gente que coge muchos atajos».

A la espera de poder tener en sus manos el oro olímpico de Londres antes de verano, reconoció que «es complicado» recibir medallas con tanto retraso pero aseguró que está «feliz» porque aunque no las tenga físicamente y le hayan privado de su momento en el podio, tiene 3 medallas olímpicas y ella se considera campeona olímpica en Londres 2012 y subcampeona olímpica en Pekín 2008.

Al margen de esto, Lidia Valentín admitió que ahora está «centrada en el campeonato de España de esta semana» y tras él, su próximo reto será el Mundial de 2017. Habrá un parón que utilizará para descansar y volver al 100% para esa importante cita. Es su próximo objetivo, subir a lo más alto del podio mundial y Lidia Valentín ya solo piensa en ello. «Lo único que me falta en mi carrera deportiva es un oro mundial y voy a estar peleando por él hasta llegar a Tokio 2020″, sentenció.

«Me veo bien, muy motivada para hacer una muy buena participación e ir al máximo, como siempre hago», afirmó. La de El Bierzo reconoció que «nunca» se centra «en los objetivos de medalla ni posiciones, porque creo que eso no depende de mí» y añadió que «lo que sí depende de mí es hacer la mejor preparación y hacer la mejor competición y si es así, la posición es una consecuencia. Estaré con las mejores luchando por un oro, una plata o un bronce».