El futbolista de la selección española Isco Alarcón, en el partido ante Serbia. Fuente: Sefútbol

Doble castigo para la selección española de fútbol sub 21, que no estará en el campeonato de Europa de 2015 ni tendrá plaza para los Juegos Olímpicos de Río 2016 tras caer con Serbia.

Jesús Ortiz García
Actualizado: 14/10/2014 20:00 horas

En juego había algo más que estar en una Eurocopa. El futuro de ‘La Rojita’ pasaba por el Ramón de Carranza, Cádiz era la puerta hacia los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. A pesar de que España lo intentó, jugó mejor, disfrutó de un torrente de ocasiones, pero si en el fútbol perdonas lo acabas pagando. La selección española sub 21 recibió un doble castigo en tierras andaluzas, se queda sin billete para el Europeo de República Checa 2015 y sin opciones de estar en las Olimpiadas de Brasil.

El verdugo ha sido Serbia, un equipo muy físico, bien ordenado y contundente que eclipsó el fútbol de toque de España. En el descuento Sergi Roberto había empatado y unos segundos después el delantero Munir tuvo en sus botas la victoria pero su disparo se topó con un gran Dimitrovic. En la siguiente jugada en un contragolpe Kostic puso la puntilla para anotar el 1-2 con el que rompía el sueño olímpico de los españoles.

Serbia hizo su partido, se replegó en su guarida y cuando se asomaba por el área de Kepa mordía. Así lo hizo en una de sus pocas llegadas a la portería española. Un centro desde la banda izquierda encontró en Sáúl el mejor aliado del conjunto balcánico. El jugador del Atlético de Madrid marcó en propia puerta tras el despeje de Gayá. Jarro de agua fría.

Los pupilos de Albert Celades se cosieron el cuero al pie, dominaron la posesión de balón, encerraron al rival en su campo, pero una pérdida en el centro del campo les costó muy caro. Tocaba remar a contracorriente. Sin Álvaro Morata, faltó pólvora en ataque ya que Munir no estuvo fino en sus intervenciones. Apenas creó peligro ‘La Rojita’ en los primeros 45 minutos, sólo un disparo de Isco y un mano a mano de Sergi Roberto que fueron solventados por Dimitrovic.

Sin acierto

Tras el descanso España intentaba dar mayor velocidad a la circulación del balón, pero siempre que llegaba a territorio rival se topaba con una tupida defensa y un mar de piernas. Con la lesión de Muniain y la entrada de Sandro, la selección disfrutó de las mejores ocasiones de las botas del jugador del Barcelona. El canario se movió pizpireto, siempre se ofrecía y estuvo cerca de empatar, pero el palo escupió su disparo ajustado.

A la desesperada, con Isco mimando la pelota demasiado lejos de la portería, España llegaba en manada al área visitante pero nadie tiraba a puerta. Se esfumaban los minutos y la esperanza, hasta que en el descuento un centro chut de Sergi Roberto acabó con el cuero besando la red. Aún quedaban 3 minutos. Poco después Munir pudo cambiar el guión de la película si su tiro no se hubiese encontrado el pie del meta serbio. En el siguiente contragolpe sí acertó Kostic con un zurdazo ante la salida de Kepa que daba la estocada a España.

Así, la selección española no estará en el próximo Europeo ni tampoco en los Juegos Olímpicos, una competición donde ha encadenado una decepción tras otra -salvo el oro en Barcelona 1992 y la plata en Sidney 2000-, ya que no participó en 2004 ni en 2008 y en Londres 2012 se dio un batacazo tras irse para casa sin marcar ni un gol a pesar de contar con el grueso del equipo campeón de Europa sub 21 un año antes. Habrá que esperar a Tokyo 2020.

ESPAÑA: Kepa, Sergi Gómez, Muniesa (Óliver Torres 69´), Manquillo, Gayá, Saúl Ñíguez, Sergi Roberto, Muniain (Sandro 53´), Deulofeu (Sarabia 60´), Isco y Munir.

SERBIA: Dmitrovic, Veljković, Petrović, Ćirković, Stojković (Filipovic 62´), Kovačević, Radoja (Mijailovic 84´), Čaušić, Kostić, Pešić (Cavric 70´) y Srnić.