La selección española masculina pasa como un apisonadora sobre Sudáfrica (6-0) y se proclama campeona en Jaca a falta de una jornada. Pablo Muñoz firma un doblete y el pichichi Oriol Boronat un gol y una asistencia.

Jesús Ortiz García

En el vestuario tenían claro que no había excusas para no ganar el Mundial. Las condiciones eran perfectas, estaban todos los jugadores disponibles y arropados por los aficionados en Jaca (Huesca). La selección española de hockey sobre hielo ha confirmado su hegemonía en la División II Grupo B y se ha proclamado campeona con una jornada de antelación. Además del oro, ‘La Roja’ logra el ascenso de categoría. Frente a Sudáfrica se mostró como una apisonadora (6-0), un equipo letal y efectivo.

Antes de que se cumpliera el minuto 4 funcionó a la perfección la conexión entre los primos Muñoz. Juan cedió el disco a Pablo y el jugador del F.C. Barcelona abrió el marcador en su primer disparo. España impuso su dominio desde el arranque, con una férrea presión, intensidad y volcándose sobre la portería de Ashley Bock con continuos disparos.

Sin embargo, el segundo tanto no llegó hasta el siguiente periodo. Fue otra vez Pablo Muñoz el autor del gol para la selección a los 24 minutos. El jugador nacido en Jaca tras un pase de Guillermo Betrán enfiló la portería y clavó el disco por el palo corto.

El tercero de España llegaría al borde del final, cuando Juan José Palacín jugó con Carlos Quevedo, quien tras disparar recogió el rechace para anotar su segundo gol en este campeonato del Mundo.

Encuentro plácido para la escuadra que dirige Luciano Basile ante un combinado africano dócil que no ofreció resistencia ante el vendaval español. Sudáfrica, encerrada en su guarida, sin criterio cuando tenía la posesión y no lograba pasar de la mitad de la pista.

‘La Roja’ del hielo disfrutaba con su juego y múltiples ocasiones. Con el encuentro ya sentenciado, llegaron 3 goles más en el tercer tiempo. En el minuto 43, el joven Alejandro Carbonell luchó por llevarse el disco y sacó a relucir su visión de juego con un pase atrás que lo aprovechó el jacetano Adrián Betran para hacer el 4-0.

Sólo 5 minutos después, Oriol Boronat robó la posesión en campo rival y Pablo Puyuelo -elegido mejor jugador del choque- definió perfecto para marcar el quinto. Y Boronat, que completó un buen partido, fue el encargado de cerrar la cuenta anotadora (6-0) con un golazo, el sexto que marca en el Mundial. Se cruzó casi toda la pista, le hizo un caño a un sudafricano y batió con calidad a Bock.

Partido muy serio de España que ha encadenado su tercer duelo sin encajar un gol gracias a la actuación de Ander Alcaine, que ya lleva más de 160 minutos consecutivos imbatido. A falta del encuentro ante Nueva Zelanda este viernes, los pupilos de Luciano Basile han conseguido el doble objetivo del Mundial: la medalla de oro y el ascenso a División II Grupo A para la próxima temporada.

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