El taekwondista madrileño de 17 años ha logrado subir al podio en los Juegos Europeos de Baku y sólo el portugués Bragança le impidió alcanzar el oro.

Jesús Ortiz García

@Jesusortizgar
16 de Junio de 2015, 19:48

De pequeño Jesús Tortosa coqueteó con el baloncesto, pero acabó decantándose por el taekwondo, deporte en el que su padre, del mismo nombre, fue subcampeón del mundo y oro europeo en 3 ocasiones en los años 80. Cambió el balón por el dobok y el tiempo le ha dado la razón. Ahora, el joven madrileño se ha colado en la élite a patadas, con trabajo y sacrificio. A sus 17 años acaba de lograr la medalla de plata en los Juegos Europeos de Baku.

El taekwondista español, Jesús Tortosa, durante un combate. Fuente: fetaekwondo

Junto al mar Caspio, la joya del taekwondo español sacó a relucir su repertorio de golpes e inteligencia sobre el tapiz para subir a lo más alto del podio. Mostró una gran madurez durante toda la competición, imponiéndose a rivales más curtidos, ante los que nunca se amedrentó. En la final de la categoría de -58 kilos a punto estuvo de derrotar al portugués Rui Bragança, actual campeón de Europa.

En el camino hacia el podio ganó al bielorruso Illia Kokshyntsau por un contundente 12-0 en octavos de final. En cuartos eliminó al deportista de Azerbaiyán, Mahammad Mammadov, por 8-3 y en semifinales al alemán Levent Tuncat, cabeza de serie número 1 y uno de los mejores taekwondistas del Viejo Continente. Pero Tortosa estaba lanzado y no quería perder la oportunidad de pelear por el oro.

Con sangre fría, rapidez en cada movimiento y un ataque letal, el madrileño no tuvo piedad de su rival y le endosó un 17-5 en sólo 2 asaltos, alcanzando varias veces el casco de su adversario. Con la plata en el bolsillo, el español quería más y se plantó en la final con una dosis de confianza para enfrentarse al portugués Bragança.

Jesús Tortosa con la plata de Baku. Fuente: COE

El duelo arrancó con ambos taekwondistas estudiándose, sin arriesgar demasiado, hasta que el luso golpeó primero en el peto de Tortosa, que igualó al comienzo del 2º asalto, pero Bragança reaccionó con una combinación de patadas al coger desprotegido al español para situarse 5-2. 

En el último asalto fue a por todas y a pesar de la buena defensa del portugués, estuvo a punto de remontar (5-4). Al final, el joven deportista español se queda a un paso del oro pero sacó petróleo en el tatami azarí con un metal plateado y puntos que le permiten escalar peldaños en el ránking olímpico en su camino hacia Río de Janeiro 2016.

Si el año pasado completó un curso brillante tras ser campeón del mundo junior 2014, bronce en el Europeo, campeón continental sub 21 y bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud, en este 2015 ya ha escrito su nombre con letras doradas al convertirse en el primer taekwondista español en ganar una medalla en los Juegos Europeos.