Javier Fernández, listo para el desafío de patinar en casa
El doble campeón de Europa y bronce en el Mundial en patinaje artístico sobre hielo afronta con ganas e ilusión la Final del Grand Prix de Barcelona del 11 al 14 de diciembre.
Jesús Ortiz García
Actualizado: 26/11/2014 16:00 horas
Hace unos años Javier Fernández tuvo que emigrar a Canadá en busca de un sueño y con mucha perseverancia y trabajo ha logrado hacerse un hueco entre los mejores patinadores del mundo. En cada pista en la que clava sus cuchillas triunfa con sus coreografías, pasos, saltos y piruetas sobre el hielo. Ahora lucha por ser más reconocido en España y tendrá una buena oportunidad en la final del Grand Prix que se disputa en Barcelona. Ya está listo para afrontar el desafío de patinar en su casa: «No me lo quería perder por nada en el mundo. Clasificarme era algo muy importante para mí», asegura.
El madrileño amarró con el oro en la Copa de Rusia y la plata en el Skate de Canadá su presencia en este gran evento de patinaje artístico que por primera vez lo organiza una ciudad española. Del 11 al 14 de diciembre en el Centro de Convenciones de la Ciudad Condal se instalará una pista con aforo para 5.500 espectadores con una vista al mar. «Poder tener una competición de este calibre en España es increíble, era un sueño que tenía de pequeño, espero que mucha gente disfrute y ojalá que suba el número de seguidores de este deporte», recalca.
El doble campeón de Europa y medalla de bronce en el pasado Mundial se muestra ilusionado por patinar ante el público español: «Estoy con muchas ganas, muy motivado porque al final puedo competir en casa, pero a la vez, estoy con algo de nervios porque es una gran responsabilidad». El objetivo de ‘SuperJavi’ es subir al podio, aunque es consciente de que tendrá que lidiar con los 5 mejores patinadores. «Hay posibilidades, pero habrá mucho nivel. Mi prioridad es realizar unos buenos programas. Estoy trabajando mucho para llegar al 100% e intentar que la gente salga contenta con mi actuación», dice.
El prodigio de Cuatro Vientos ha tenido un gran arranque del curso aunque confiesa que aún tiene margen de mejora. «Estamos a principios de temporada y hay que pulir detalles, ganas tengo muchas y aún quedan los retos más difíciles. Tengo que trabajar al 100% para que los 93 puntos que logré en la Copa de Moscú se conviertan en más», apunta Fernández.
Programas con mucho potencial
Este año junto a su entrenador Brian Orser volvió a acudir al coreógrafo David Wilson para diseñar 2 programas que «tienen mucho potencial, incluso más que los de la temporada pasada que fue año olímpico», insiste el español. El corto es con el tema ‘Black Betty’, un superéxito rockero de los años 70 de la banda Ram Jam: “Me encanta, es movido y pegadizo». Y en el largo ha pasado de ser el agente Peter Gunn al divertido y hábil Fígaro bajo los acordes del ‘Barbero de Sevilla’ de Giacchino Rossini, en el que de nuevo se exige 3 cuádruples.
«Son 2 grandes programas y habrá que esforzarse y trabajar duro para explotarlos. Tenemos más opciones de hacer algo más que el año pasado», cuenta el madrileño de 23 años, que ya ha superado la desilusión que le supuso ser 4º en los Juegos Olímpicos de Sochi a 2 puntos de la medalla: «Fue un error de cálculo, algo que me dio un poco de rabia, pero me ayudó a seguir adelante y a ponerme otras metas. No miro hacia atrás y lo único que hago es mirar al futuro. Lo de Sochi me dio fuerzas y energía».
Tras la final del Grand Prix de Barcelona, Fernández participará el 20 y 21 de diciembre en el campeonato de España. «Luego tendré el Europeo en febrero y voy a pelear por el tercer título consecutivo, que sería una bomba. Y en marzo quiero subir al podio en el Mundial», explica un patinador con mucha ambición al que no le da miedo competir con la presión de estar entre los mejores. «Parte de culpa la tengo yo ya que en todas las competiciones a las que voy consigo medallas y tengo a la gente mal acostumbrada (risas). Estoy muy orgulloso de todo lo que estoy consiguiendo y espero dar más medallas a mi país y a la gente que me está siguiendo», apostilla.