Israel Blanco finaliza 10º en el Mundial de parabobsleigh
El piloto asturiano se queda a 2,65 segundos del podio en el campeonato del mundo disputado en St. Moritz (Suiza).
Jesús Ortiz García
@JesusOrtizAD
05 de febrero de 2017, 17:17
Israel Blanco ha puesto el broche a una buena temporada en parabobsleigh con un 10º puesto en el Mundial que se ha celebrado en St. Moritz (Suiza). El piloto asturiano se ha quedado a 2,65 segundos de las medallas. «Era muy difícil hacer podio ya que estaban los mejores. En el segundo día bajé mucho mejor que en el primero, donde tuve unas malas bajadas», ha comentado.
Le penalizaron las dos mangas de la jornada inaugural, tras completar el recorrido por el tobogán suizo con tiempos de 1:16.27 y 1:15.82, que lo dejaban provisionalmente en la posición 11ª. Las opciones de pelear por las medallas se complicaban, aunque en la 3ª (1:16.08) y en la 4ª (1:15.52) bajada mejoró, para acabar en la 10ª plaza de la clasificación general.
El deportista español cierra el curso con dos medallas, un bronce en la Copa del Mundo y otro bronce en el campeonato de Europa. «El balance es positivo, es la primera vez que compito en todas las pruebas. Solo conocía la pista de Park City (EE.UU.), donde hice podio, y la experiencia en el resto lo tomo como un aprendizaje», ha asegurado.
Pocos recursos, buenos resultados
Cuando hace poco más de dos años el director deportivo del ‘Spanish Bobsleigh’, Javier Pintado, le propuso enrolarse en esta disciplina de bobsleigh adaptado, Israel no se lo pensó. «Conocía este deporte por la película ‘Elegidos para el triunfo’ de los jamaicanos y alguna otra prueba por televisión. Cuando me convenció Javier para hacer este deporte no me esperaba lograr estos resultados tan rápidos», ha recalcado.
Pese a su inexperiencia y a contar con pocos recursos para afrontar los entrenamientos en el hielo y los gastos de los viajes, ya se codea con los mejores pilotos del mundo. «Poco a poco me voy acercando a ellos, aunque muchos de mis rivales, como canadienses y letones tienen ventaja ya que cuentan con pista propia y entrenan mucho. Pero estoy bastante cerca de ellos», ha añadido el corverano.
Blanco, que con 21 años perdió la pierna izquierda en un accidente laboral y sufrió daños en la derecha, se las ha tenido que ingeniar para poder viajar y competir. Muchos kilómetros por carretera recorriendo Europa y compartiendo casa con varios compañeros para abaratas costes: «Todos los gastos salen de mi bolsillo, cuento con algo de ayuda de la Federación Asturiana de Deportes de Invierno y la Federación Española me pagó las tasas de las últimas pruebas».
Para la próxima temporada confía en poder entrenar alguna semana más sobre el hielo antes de las competiciones «para ser más competitivo y estar peleando con los mejores». En 2018 el parabobsleigh, a falta de confirmación oficial, espera estar como deporte de exhibición en los Juegos Paralímpicos de Pyeongchang (Corea), pero el objetivo de Israel Blanco es estar en Pekín 2022: «Quiero llegar con ciertas garantías para realizar un buen papel, para lo cual necesitaría competir en las Copas del Mundo y en los mundiales que quedan hasta los Juegos».