Fran Garrigós y Niko Sherazadishvili, talentos de la factoría de Quino Ruiz
Jesús Ortiz García
@Jesusortizgar
16 de Junio de 2015, 18:26
Con 20 y 19 años son 2 de los judokas con mayor futuro en España, tienen más cerca los Juegos Olímpicos de Río y pelearán por medalla en el próximo Europeo en Baku.
Pundonor, constancia y sacrificio son algunos de los valores que Quino Ruiz intenta trasladar cada día a sus alumnos sobre el tatami. El ex seleccionador español y 3 veces olímpico dirige en el Club Brunete de Judo una factoría de jóvenes talentos que están brillando en el panorama internacional. Entre ellos destacan Fran Garrigós (20 años) y Nikoloz Sherazadishvili (19 años), 2 joyas a las que pule con mimo y a las que espera pilotar hacia los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
El objetivo del maestro es convertirlos en los mejores judokas y, de momento, ha conseguido que ambos lideren el ránking mundial júnior y que ya se codeen con las estrellas del tatami en categoría sénior. Fran se estrenó esta temporada a lo grande con un bronce en el Grand Prix de Zagreb: «Había conseguido 3 quintos puestos y por fin llegó la medalla. Ahora queda todo lo más importante con el Europeo y el Mundial. Estoy entrenando duro para conseguir buenos resultados».
Campeón de Europa y del mundo junior en -60 kilos, el mostoleño está situado en el puesto 12 del ránking olímpico y el sueño de Rio lo tiene a su alcance. «Un poco más cerca sí lo veo pero está igual de difícil, hasta que no den por cerrada las plazas en abril de 2016 con el último Europeo, todo está abierto. Este es el año más complicado con las competiciones más importantes en las que hay que intentar puntuar lo máximo posible», explica.
Acaba de debutar en la potente Bundesliga alemana y en el Grand Prix de Hungría ha sido 5º, así que asegura sentirse cada vez mejor entre los ‘mayores’. «El trabajo que ha hecho Quino conmigo ha sido muy bueno, cuando competía en júnior ya me iba preparando el terreno en sénior, y eso me ha servido para que el salto fuese más natural», dice. «Su mayor cualidad es que tiene un buen físico, es muy inteligente compitiendo y seguro. Hay 10 judokas en el mundo que pueden ganarle, pero él también puede vencerles a ellos», asevera el entrenador.
Fran ya piensa en el Mundial de agosto en Kazajistán, en el que el campeón obtendría 900 puntos, pero antes debe afrontar el campeonato de Europa, enmarcado en los Juegos Europeos de Baku (Azerbaiyán). «Quiero hacer un buen papel, conseguir una medalla y sumar todos los puntos posibles de cara a los Juegos Olímpicos. Estoy en un buen estado de forma y me veo preparado para pelear por subir al podio», añade.
De Georgia a Madrid
Hace 6 años Niko Sherazadishvili llegó a Madrid procedente de Georgia y lo primero que hizo al poco de aterrizar fue buscar un gimnasio donde seguir desarrollando sus habilidades como judoka. «No sabía ni una palabra de español y empecé a entrenar en el club Bushidokwai. Al año siguiente me hablaron del club Brunete, conocí a Quino Ruiz y todo cambió», relata. Pasaba horas y horas sobre el tatami, incansable absorbía cada clase de su maestro, sin embargo, aún no podía competir internacionalmente.
«Nada más que peleaba en campeonatos de España hasta que en abril de 2014 me dieron la nacionalidad. La espera se hizo bastante larga, se pasaba mal, pero mereció la pena. Antes de debutar me dieron la opción de participar con Georgia, pero mi objetivo era representar a España», recalca. Sólo necesitó un par de combates para demostrar su talento: «A los 3 días de tener la nacionalidad se celebró en Madrid un European Open, 1ª competición que puntuaba para los Juegos Olímpicos de Río y saqué medalla. Poco después fui bronce en el Europeo y plata en el Mundial júnior».
Ahora quiere dar un paso adelante en la categoría sénior y una buena oportunidad la tendrá en los Juegos Europeos de Baku. «Fue una sorpresa clasificarme para este campeonato de Europa y si me encuentro bien en la competición, me veo con posibilidades de lograr medalla. Mi objetivo es seguir acumulando puntos para ir a los Juegos de Río, voy a darlo todo porque sólo pienso en estar allí», subraya.
Para su entrenador, Niko es «inteligente, tiene buena planta física y capaz de remontar cualquier resultado, aunque comete los errores fruto de su juventud, le queda por aprender. Pero estoy seguro de que será el mejor judoka sénior de la historia de España en 90 kilos. Me aventuraría a decir que será un futuro Ilías Iliadis, deportista griego de orígen georgiano, un mito del judo». «Mi deseo y mi sueño es ser campeón del mundo y olímpico como él. Quino confía plenamente en mí, pero todavía me queda mucho camino por recorrer, voy a darlo todo por ser el mejor», insiste el joven.
«Tanto Fran como Niko son judokas excepcionales, con una calidad técnica tremenda y una madurez impresionante. Cuando me siento en la silla junto al tatami, ambos me transmiten mucha seguridad y saben que pueden ganar a cualquier rival. Van a llegar muy lejos», apostilla el maestro Quino.