La madrileña Eva Calvo, a la derecha, durante el campeonato de Europa en Bakú (Azerbaiyán). Fuente: Fetaekwondo

La joven de Leganés ha logrado el oro en el Europeo de taekwondo cuando apenas lleva unos 6 años en este deporte. «Lo más complicado es mantenerse, si me duermo lo pagaré caro», dice.

Jesús Ortiz García

Resopló de alivio y estalló en júbilo cuando tumbó a la campeona olímpica Jade Jones. Era el premio a años de constancia y esfuerzo en el gimnasio del Club Sánchez Élez. En Bakú (Azerbaiján), la española Eva Calvo exhibió su potencial y abanico de patadas para conquistar en la categoría -57 kilos el oro en el Europeo y doctorarse en el tatami. «Estoy muy contenta por el gran valor que tiene la medalla. En torneos internacionales había conseguido buenos resultados, como un bronce en el Mundial, pero no había ganado uno tan importante y ahora puedo decir que soy campeona de Europa», recalca.

Con 22 años ha logrado su mayor éxito y, aunque su nivel y progresión crecen a pasos agigantados, confiesa que no esperaba esta recompensa tan pronto: «Todo salió mejor de lo esperado porque fui al campeonato a sumar puntos y al final quedé primera. Era algo que me había marcado desde que comencé en este deporte pero no pensé en ganarlo ya y de esta manera. Eso sí, no quiere decir que sea la mejor, porque hay adversarias con mucho nivel».

Para alcanzar su primer gran título tuvo que sortear a rivales complicadas, sin embargo, los resultados holgados de sus combates muestran la autoridad que la madrileña impuso durante el campeonato. En octavos ganó a la griega Apostolia Tsantoukla por 9-3, en cuartos doblegó a la croata Tanjia Rastovic por 13-7 y en semifinales venció a la sueca Nikita Glasnovic por 9-2. Y eso que asegura que al principio no se encontró cómoda. «En los primeros combates estuve mal, no pude controlar los nervios y me costó entrar en situación, pero los resolví bien y empecé a disfrutar», dice.

En la final le esperaba la británica Jones (11-9), a la que había ganado en el Open de España y en el Grand Prix de Manchester. «Había mucha tensión, era la tercera vez que nos encontrábamos en tan poco tiempo. Ambas nos tenemos bien estudiadas y ganaría la que menos fallos cometiese. El combate estuvo muy complicado durante varias veces, perdía por 3 puntos pero lo dí todo y remonté en 2 ocasiones», recuerda. «Es una chica competitiva, viene de ganar en los Juegos de Londres y encontrarse con una rival que le planta cara hace que me coja un poco de manía», bromea y añade que tendrá que estar «atenta la próxima vez porque llegará con más ganas».

Nuevos objetivos

Con los 40 puntos que le otorga el título europeo, Eva Calvo se sitúa entre las 4 primeras del ranking y ya otea en el horizonte nuevos objetivos. «Ganar en Bakú me ha dado más confianza aunque hay que mantener los pies en el suelo. Las siguientes competiciones serán el Open de Suiza y los Grand Prix en verano, espero estar a un buen nivel», apunta.

Eva Calvo con la medalla de oro. Fuente: CSD

Recién aterrizada en Madrid y sin tiempo para saborear el oro, la discípula de José María Martín ‘Xixo’ ha vuelto a ponerse el kimono y ha trazado el plan a seguir en los próximos meses. «Tengo que mejorar en aspectos como controlar los nervios, que el primer combate no sea para entrar en calor si no empezar concentrada y activada desde el inicio. La movilidad o los giros también hay que mejorarlos. Ya he hecho una lista de cosas para corregir, no hay que perder tiempo», subraya.

La guerrera de Leganés apenas lleva 6 años en este deporte y ya cuenta con un buen currículum: varias veces campeona de España, bronce en el Mundial de Puebla (México) y oro en el Europeo, en los Juegos del Mediterráneo de Mersin (Turquía) y en el Grand Prix de Manchester. «Como empecé tan tarde en el taekwondo he tenido que darme prisas en aprender y en ganar medallas (risas). La gente se sorprende de la progresión que llevo y estos meses han sido los de mi explosión, los de los logros», comenta.

Su filosofía es la de ir paso a paso sin presión ni metas lejanas, pero se le escapa una sonrisa cuando le preguntan por los próximos Juegos Olímpicos: «Es un sueño pero miro de reojo a Río de Janeiro, todavía queda mucho, por medio hay demasiados campeonatos que puntúan, así que no me puedo dormir porque en el ranking subes y bajas constantemente y lo pagaría caro. El objetivo es mantenerse, que es lo más complicado ya que el taekwondo es como una carrera de fondo», finaliza.