El deporte le gana el pulso a los fármacos en obesidad
«En términos de coste-efectividad, la actividad física puede llegar a ser más efectiva que las terapias farmacológicas para tratar ciertas patologías como la obesidad o la diabetes del tipo 2» según ha explicado el experto Jonatan Ruiz, investigador de la facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Granada.
Avance Deportivo
Los expertos en nutrición y en ciencias del deporte han ofrecido su opinión, experiencia y conocimiento sobre los hábitos de vida saludable que hay que seguir y la importancia del deporte dentro de éstos.
Esta vez la información ha tomado forma a través del curso “Equilibrio energético y estilos de vida saludable”, organizado por la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT) y la Universidad de Granada (UGR). En él se tratan temas como los graves problemas de salud que provocan el sedentarismo y la mala alimentación en nuestro país.
El investigador Jonatan Ruiz ha declarado que en términos de coste-efectividad, la actividad física puede llegar a ser más efectiva que las terapias farmacológicas para tratar ciertas patologías como la obesidad o la diabetes del tipo 2. Este experto en ciencias del deporte ha añadido que existe suficiente evidencia científica que indica que la práctica regular de actividad física mejora la salud mental y física de personas sanas y enfermas.
Por su parte, la doctora María Dolores Ruiz, Catedrática de Nutrición y Bromatología de la UGR y coordinadora de dicho curso, ha informado que en función de la actividad física, el sexo y la edad, las ingestas recomendadas son guías cuantitativas sobre la cantidad de energía, macronutrientes (hidratos de carbono, lípidos y proteínas), minerales y vitaminas que las personas sanas deben tomar para cubrir sus necesidades y prevenir deficiencias nutricionales.
“Estamos observando un alejamiento del patrón de dieta mediterránea. Este hecho ya se puso de manifiesto en el año 2000 y aunque no ha empeorado, tampoco se ve una tendencia al cambio sobre todo en la población adulta joven” ha declarado.
Por su parte, el profesor asociado de Salud Pública y Nutrición Comunitaria Javier Aranceta, ha explicado que el principal objetivo de las guías alimentarias es reducir la mortalidad y la morbilidad prematuras por enfermedades crónicas evitables.
Este profesor sostiene que la sociedad necesita conseguir un adecuado equilibrio energético y que la mejor garantía para conseguirlo será aumentando el gasto energético relacionado con la actividad física.
Finalmente ha asegurado que el sistema educativo y el sistema sanitario de nuestro país nos pueden ayudar, pero es la sociedad quien debe adquirir el protagonismo y la responsabilidad de mejorar en todos los frentes. Para ello, Javier Aranceta aconseja dedicar más tiempo a comprar mejor, cocinar mejor, comer en armonía y realizar actividades físicas que nos permitan disfrutar.