David Cal. Fuente: COE

El que fuera piraguista olímpico en C1 ha explicado que «echa de menos su especialidad» en un encuentro con el Comité Olímpico Español en el que ha hablado de este periodo excepcional.

Avance Deportivo

@deportivoavance
4 de junio de 2020, 18:00

Pregunta.- ¿Cómo ha pasado el confinamiento?

Respuesta.- El confinamiento lo he llevado de la mejor forma posible, al principio fue más duro, porque pasas de hacer vida normal a estar confinado. En mi caso me ayudó bastante el seguir trabajando desde casa ya que seguía manteniendo una rutina y en mis ratos libres busqué otras actividades que me ayudaron a estar entretenido. De no ser así seguramente me hubiese costado mucho más.

David Cal durante la final de C1 1000m de los JJ.OO Londres 2012 donde consigui la medalla de plata.

P.- ¿Se sube todavía a la canoa de vez en cuando para dar unas paladas? ¿Lo echa de menos?

R.- Desde que me retiré han cambiado muchas cosas, en C1 me he subido en ocasiones contadas y es algo que sí echo de menos. Entreno al equipo universitario de C10 (canoa de 10 personas) y suelo salir a remar bastante con ellos para matar el gusanillo.

P.- Cuando puso fin a su carrera se trasladó a Murcia y empezó a trabajar en la Ucam. ¿Qué le aporta y como valora el apoyo al deporte que se lleva a cabo desde allí? ¿Cuál es su misión en la universidad?

R.- Cuando me retiré no tenía muy claro que iba a hacer, después de dedicar toda mi vida al piragüismo y la competición, no encontraba algo que pudiese llenar ese vacío. La Ucam me abrió sus puertas y estoy encantado de formar parte de este proyecto en el que se ayuda a cientos de deportistas. Trabajo en el Servicio de Deportes gestionando la actividad deportiva de la universidad junto con mis compañeros, y soy el responsable del equipo de piragüismo.

P.- Pregunta trampa, ¿tiene miedo de que su amigo Saúl Craviotto pueda bajarle de lo más alto del podio olímpico?

R.- Saúl es excelente deportiva y personalmente. Tengo claro que lo hará muy bien en Tokio y quién mejor que Saúl para bajarme de lo más alto del podio olímpico.

P.- Ha contado alguna vez que es muy despistado. ¿Qué es lo más curioso que se le haya olvidado?

R.- Es cierto que soy despistado, lo más curioso que se me olvidó podría ser el taco (rodillera) de la canoa, (la pieza donde se apoya la rodilla) en la Copa del Mundo de Duisburgo del 2003; conseguí uno, pero me llevó una hora amoldarlo para mí.

P.- Cuéntenos la anécdota con Alejandro Blanco, presidente del COE, en los JJOO de Pekín.

R.- En la preparación de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 nos concentramos los últimos meses en Saucelle (Salamanca), donde el clima y las condiciones del agua eran perfectas para la adaptación a la pista de Shunyi. El problema es que estaba bastante escondido y era difícil de encontrar y Alejandro cuando nos vino a visitar tuvo que dar varias vueltas, le costó encontrarnos.

P.- Siendo una leyenda del deporte español, ¿qué consejo daría a los jóvenes deportistas que quieren ser como usted?

R.- El consejo que les doy es que practiquen un deporte que les guste, que disfruten con él y que no se obsesionen con los resultados.