Carolina Robles, recalificada para la final de 3.000 m obstáculos
La obstaculista española ha terminado 13ª, con un tiempo de 9:45.37, tras verse involucrada en una caída en la prueba de los Juegos Olímpicos de Tokio.
Avance Deportivo
@deportivoavance
1 de agosto de 2021, 11:00
Mala jornada matinal de domingo para el atletismo español en Tokyo 2020, en la que la recalificación de Carolina Robles fue la única buena noticia de una noche en la que los españoles estuvieron lejos de sus marcas. 4 españoles debutaban en unos Juegos Olímpicos esta madrugada: Laura Redondo en lanzamiento de martillo, Fátima Diame en salto de longitud, Carolina Robles en 3.000m obstáculos y Óscar Husillos en 400m. Todos ellos vivieron la tristeza de quedarse fuera de la siguiente ronda, aunque la obstaculista Carolina Robles finalmente fue recalificada para la final.
La sevillana llegaba a los Juegos Olímpicos después de perseguir una mínima campeonato tras campeonato. Su esfuerzo y constancia se tradujeron en una plaza por World Ranking, que le iba a permitir convertirse en olímpica en Tokio. Antes de salir, Carolina Robles sabía que debía hacer marca personal para poder conseguir una plaza en la final olímpica de 3.000 m obstáculos. El corte en las 2 carreras previas se situó en 9:31.25 y ella llegaba con una marca personal de 9:34.30.
Sin embargo, cerca de la mitad de la carrera, Carolina se fue al suelo tras tropezar con una rival al pasar un obstáculo. Al caer, delante de ella, a sus pies, en el suelo estaba la canadiense Alycia Butterworth. Carolina no pudo esquivarla y se fue al suelo, croqueta incluida. Se levantó al instante, siguió luchando, pero no pudo reengancharse.
Terminó 13ª, en 9:45.37, dolorida en la cadera y la espalda, pero peleando hasta el final, como reconoció en TVE: “Estoy bien, son circunstancias de carrera. Estaba en una posición que me veía muy bien, pero no he dudado en levantarme, porque yo quería ser olímpica y llegar a la meta. He intentado cambiar de ritmo, pero ya no he podido. Hay que aceptar la vida como viene y lo seguiremos intentando”. Una hora después, en la aplicación de la norma 17.2.1, el juez decidió integrarla en la final “por no poder avanzar durante la carrera por la caída dentro de su propio grupo”. De este modo, el miércoles 4, a las 13:00, Carolina Robles será la segunda española en disputar una final olímpica de 3.000m obstáculos, tras Zulema Fuentes-Pila en 2008 (12ª).
La jornada matinal había comenzado con Laura Redondo. La lanzadora llegaba con el objetivo de estar en sus marcas y, por qué no, volver a batir su récord de España de 70.66. Sin embargo, Laura comenzó la competición con dos nulos y, en el tercer intento, se quedó en 62.42, decimocuarta posición de su grupo y vigésimo novena posición global. En declaraciones a TVE, Laura reconoció llegar “muy confiada de poder lanzar lejos. Estaba entrenando muy bien, pero no tengo ninguna explicación para lo que ha pasado”.
Sin salir de los concursos, la siguiente en competir en el estadio olímpico fue otra debutante: Fátima Diame. Tras un primer nulo en longitud, la valenciana saltó 6.27 en el segundo. A medida que avanzaba la competición, el corte para la final se situaba sobre los 6.56, una marca que ya había logrado superar en cinco ocasiones esta temporada. Sin embargo, en el último salto, Fátima se quedó en 6.32, décima de su grupo y vigésimo primera en la clasificación general, lejos de los 6.60 de la australiana Brooke Stratton que marcaron el corte de las doce mejores.
En declaraciones a TVE, una muy afectada Fátima Diame reconoció que “el nulo me ha sacado un poco de competición. Se ha pasado con una marca que yo me veía muy asequible. Soy capaz de saltar 6.60 y no me ha salido, estaba muy bien, he talonado muy bien y no sé qué me ha pasado. Venía con unas expectativas más altas, pero a seguir y a por París”.
El último participante del día fue el vigente campeón de Europa de 400m en pista cubierta, Óscar Husillos, que debía terminar en las tres primeras posiciones o correr en menos de 45.51 si quería pasar a semifinales. Sin embargo, tras los primeros 300 m, Óscar comenzó a quedarse rezagado para acabar sin fuerzas, dejándose ir, en 7ª posición con 48.05.
En zona mixta, un contrariado Husillos no encontraba explicación a los sucedido: “No sé qué me ha pasado. No le veo una explicación. Sí que es verdad que a mitad de carrera iba muy bien, pero en los últimos 350 se me ha empezado a agarrotar el isquiotibial derecho y me he salido de carrera, pero no le quiero poner excusas. Me ha salido una carrera mala, malísima, la preparación estaba siendo perfecta y auguraba una gran marca. Venía a la mejor cita de mi vida y me voy bastante entristecido y desilusionado. Pido perdón porque yo lo he pasado mal, pero sé que desde casa también lo habrán pasado igual de mal. Yo antes de venir estaba rozando el récord de España, sé que era capaz de ello. Podía estar en semifinales y no encuentro explicación, porque he trabajado mucho para llegar hasta aquí”.