Nadal saca músculo en el abierto de México tras vencer al ruso Daniil Medvedev
Avance Deportivo
@deportivoavance
2 de marzo de 2022, 9:00
Rafael Nadal sigue implacable en este inicio de curso. Casi un mes después de firmar aquella agotadora conquista en Melbourne frente Daniil Medvedev, el mallorquín acaba de pasar a la final del abierto mexicano tras volver a derrotar al ruso por 6-3 y 6-3 en un encuentro que dominó abiertamente desde el principio.
Fueron dos horas de partido en Acapulco, con la grada a favor y una humedad en el ambiente que obligó al rey de los Grand Slams a cambiarse de camiseta hasta en un par de ocasiones. Se trata del triunfo número 14 desde que arrancara este 2022, por lo que se coloca a sólo tres victorias de igualar los mejores inicios de temporada que firmaron Sampras y Federer en 1997 y 2018, respectivamente.
En el próximo duelo, ya el último del torneo, Nadal se medirá al británico Cameron Norrie. La importancia de la cita es tal que ya se deja ver un volumen de pronósticos tan elevado como el que tiene lugar en las apuestas deportivas de futbol, que lideran el sector gracias a campeonatos de primera categoría como LaLiga Santander o la Uefa Champions League. Este es el nivel de la competición ATP que nos ocupa, por lo que no es extraño que las cuotas se hayan disparado de cara a su desenlace. La trayectoria da como favorito al español, que ha vencido a Norrie en todas las ocasiones en las que se han enfrentado.
El balear tiene claro que, a sus treinta y cinco años, se encuentra en un excelente momento de forma física y mental. Así lo certifica el hecho de que haya podido resistir en territorio mexicano después del desgaste sufrido ante el juego de aquel Medvedev que lo puso contra las cuerdas en Australia. La concentración y el estímulo de seguir sumando títulos están siendo determinantes en su regularidad. Si logra hacerse con la victoria en la final se convertirá en tetracampeón de Acapulco, igualando así los registros de Thomas Muster y David Ferrer.
Empezó pronto Nadal a fijar el rumbo del partido frente a Daniil Medvedev. Después de abrir el marcador con suma destreza, se topó en seguida con la respuesta constante del ruso, que estuvo rápido en cada una de sus acometidas iniciales. Fue a partir de ahí cuando el manacorí comenzó a abrir la distancia hasta llegar a un motivador 3-1 que se convertiría en la tónica del resto del encuentro. Su planteamiento no dejaba lugar a dudas: había que cerrar el primer set desde la ventaja. Y así trató de hacerlo, conocedor además de la facilidad de su oponente para detectar fisuras en la táctica de los demás y sumar puntos en los servicios.
La presión se apoderó del ruso, que cedía el cuarto juego tras lanzar una defectuosa volea que no pudo ir más allá de la red. Nadal lo estaba arrinconando, exigiéndole además permanecer alejado de la línea de fondo. A los treinta y nueve minutos de juego Nadal agotaba el primer set a golpe de break.
No variaron mucho las formas en los siguientes compases. El jugador español supo mantener el ritmo de superioridad, llegando así a conseguir una rotura en el primer juego de la siguiente vuelta que declinaría la balanza a su favor. Con el partido de cara, Rafa supo evitar el intento de escalada de Medvedev, que en el cuarto juego acumuló hasta 4 bolas de break que de poco le sirvieron ante la contundencia de un Nadal muy crecido. Este estuvo intratable en los saques y las voleas, así como con la fuerza de su brazo derecho.
Con 3-2 en el marcador se abrió un escenario de ida y vuelta protagonizado por el gran número de dejadas que ambos estaban ofreciendo. Quería el ruso la igualada y era el momento de hacer valer su perfil de número uno, pero Nadal volvió a arrebatarle el punto de break e instauraba un juego desmoralizante que hundió a Daniil en el declive. Otro definitivo 6-3 ponía el broche final a una disputa en la que el mallorquín peleó cada uno de los puntos con la misma intensidad.
Ya en rueda de prensa, Rafa Nadal quiso hacer un breve análisis de esta semifinal, donde sobre todo puso de relieve la espectacularidad del segundo set, que contó, según sus palabras, con “puntos increíbles”. Destacó asimismo la agresividad del ruso en el primer tramo y señaló el buen índice de respuesta que este había logrado perfilar de manera copiosa. Desplegó bien el balear su estrategia, en la que han cobrado una especial importancia sus saques y su capacidad para salvar un volumen altísimo de bolas de break.
Con este resultado Nadal llega a la final del torneo con buenas sensaciones y con la cabeza puesta en seguir avanzado hacia registros más altos.