Despolarización mental, conoce qué es y cuáles son los beneficios de esta técnica
Avance Deportivo
@deportivoavance
26 de agosto de 2024, 15:00
En 2019, l’Académie de la Haute Performance creó un método terapéutico que ha revolucionado el ámbito deportivo: la despolarización mental. Básicamente, está diseñado para derribar las barreras que limitan la liberación del máximo potencial, ayudando a alcanzar cualquier propósito.
Durante los Juegos Olímpicos de Tokio y Pekín, el 80% de los deportistas que lo implementaron alcanzaron medalla olímpica, lo que habla muy bien de los resultados que pueden obtenerse.
Gracias a la iniciativa de Lionel Barrachin y Pierre David, la filosofía de esta institución de psicología deportiva acaba de llegar a España, consultar aquí. Con la promesa de contribuir al desarrollo de las capacidades, estos ex deportistas patentaron el método a fin de llevarlo hasta cualquier persona que desee aprovechar sus beneficios.
¿Qué es la despolarización mental?
Definir la despolarización mental requiere entender primero el significado del pensamiento polarizado, el cual se define como el uso de etiquetas que se convierten en limitaciones que impiden avanzar y alcanzar nuestro máximo potencial.
En este sentido, el método combina psicología deportiva y desarrollo personal, a fin de evitar la polarización y contribuir a la consolidación de los objetivos, a través de la liberación de las capacidades.
De acuerdo a los especialistas, los bloqueos mentales suelen ser una de las principales causas que impiden alcanzar el éxito deportivo, sin importar el conocimiento pleno de la técnica. Esto es lo que se conoce como autoboicoteo, o lo que es igual, la sensación de no merecer un determinado logro.
La polarización limita el desarrollo personal
En su mayoría, las personas determinan su conducta de acuerdo a los estándares establecidos en su mente. Si bien esto no está del todo mal, en ocasiones, y de manera inconsciente, incurren en la polarización del pensamiento, por ello, terminan convirtiendo sus valores en barreras que impiden alcanzar los objetivos.
Para entenderlo mejor, tomemos como ejemplo una deportista que defiende la importancia de la humildad. Aunque rechazar la arrogancia lo convierte en un mejor ser humano, en competencias deportivas es necesario un poco de altivez.
En este sentido, la clave de la despolarización mental radica en encontrar un punto medio de equilibrio y dejar el pensamiento extremista. Es necesario cotejar los pros y contras de cada lado, abandonando los prejuicios y miedos.
¿Cómo se logra la despolarización mental?
A diferencia de otras técnicas, la despolarización mental tiene como meta la transformación de la identidad de la persona. De esta manera, descarta el empleo de las herramientas que han formado parte de la psicología deportiva tradicional y apuesta por la adopción de estrategias que modifican la forma de asumir los retos.
La adopción del método tiene impacto tanto dentro del ámbito deportivo, como en la vida cotidiana. Esto se debe a que elimina los estereotipos creados a partir de las normas creadas conforme a la educación recibida, las experiencias, los traumas e incluso, la sociedad y la cultura.
Se trata de abandonar las limitaciones y vivir el presente sin preocuparse por lo que otros piensen. Ya no se trata de hacer las cosas por mantener contentos o conformes a los demás, sino de disfrutar plenamente y reconectar con nuestro niño interior.
¿Por qué la despolarización mejora el rendimiento deportivo?
Teniendo en cuenta que este método psicológico tiene como premisa deshacerse o, en su defecto, disminuir los pensamientos negativos y limitantes, la despolarización contribuye a que los deportistas optimicen sus capacidades e incrementen su nivel de desempeño.
De forma precisa, combina diferentes herramientas de la terapia cognitiva y conductual, con técnicas de visualización y meditación, permitiendo la recuperación del balance entre el cuerpo y la mente.
El pensamiento influye en las emociones y el comportamiento
Contrario a lo que muchos creen, el deporte va más allá del uso de la capacidad física. Sin importar la disciplina, el éxito está condicionado a la fortaleza mental y la manera de responder a diferentes escenarios.
Por norma, tanto los deportistas aficionados como los atletas élite se ven sometidos a niveles elevados de presión, ansiedad y estrés, sin apartar las expectativas, el miedo a fallar y la frustración que genera el fracaso. Todas estas emociones no solo pueden comprometer su potencial, también impiden conseguir buenos resultados.
Mediante la despolarización, los deportistas tienen la oportunidad de aprender a identificar los pensamientos negativos o irracionales que originan sus molestias e inseguridades.
Una vez detectados, son reemplazados por conceptos o ideas positivas, que propicien la calma, aporten seguridad, mejoren la concentración y sirvan de impulso motivacional.
La mejor parte de la técnica es que puede realizarse antes, durante y hasta después de enfrentar las rutinas de entrenamiento o competir. Asimismo, es posible llevarlo a cabo de manera personal o grupal.
Academia de Alto Rendimiento, el lugar indicado para recuperar el equilibrio
Aunque la despolarización mental está vinculada directamente con el autoconocimiento, la técnica requiere la dirección profesional de los especialistas en psicología deportiva.
Actualmente, la Academia de Alto Rendimiento representa la mejor opción para disfrutar las ventajas que ofrece el método. En esta reconocida institución de coaching mental, prestan servicio verdaderos expertos en el análisis conductual y abordaje de los factores que sirven de vínculo entre la psicología y el deporte.
De esta forma, tenemos a disposición un equipo integral conformado no solo por conocedores de las diferentes especialidades relacionadas con la psicología deportiva, sino también coaching, nutricionistas y preparadores físicos.
Ventajas más allá del rendimiento deportivo
Aunque la despolarización mental tiene como principal propósito contribuir al incremento del rendimiento deportivo, hablamos de un método de alto impacto sobre la salud física y emocional. Entre los beneficios más destacados tenemos:
- Reducción sustancial de los niveles de estrés.
- Disminución de la tensión muscular.
- Control de la fatiga.
- Menor riesgo de lesiones.
- Coadyuvante en los procesos de recuperación.
- Promotor de la relajación y el descanso.
- Mejor respuesta a los tratamientos y rehabilitaciones.
- Incremento de la autoestima, seguridad y confianza en sí mismos.
- Aumento de la valoración personal.